¿Por qué es importante reciclar?
Vivimos en un mundo demasiado acelerado en el que no prestamos mucha atención a lo que sucede a nuestro alrededor. El día a día en el que estamos inmersos suele transcurrir entre la casa y el trabajo o la casa y la escuela, por lo que no solemos observar lo que acontece más allá de nuestra rutina, lo que sucede en nuestro país y en el mundo entero. Así, pasamos de largo el daño de nuestra forma de vida provoca sobre la naturaleza, sobre la flora y a la fauna.
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¿Cuál es la importancia que concibe el comprender la ventaja intrínseca que conllevan los diversos procesos de reciclaje?
Primero, debemos tener un consenso general sobre qué es “reciclar”. Básicamente, podemos entenderlo como la recolección y la transformación de objetos (generalmente producidos por el ser humano), que son tomados como deshechos, en nuevos materiales con las mismas o con diferentes funciones a la de los objetos que les dieron vida.
La importancia del reciclaje radica, principalmente, en la ayuda que otorgamos; dirigida, en primera instancia, hacia el medio ambiente y, luego, como habitantes de este planeta, hacia nosotros mismos. Utilizar productos que previamente han sido reciclados reduce el empleo de energía para su fabricación, uno de los motivos de más peso de los que provocan el calentamiento global. Además, la constante y acelerada producción de objetos que es común en nuestra sociedad genera, incuestionablemente, una gran cantidad de deshechos, de los cuales la mayoría tarda varios años en biodegradarse, algunos hasta miles de años.
El reciclaje de papel es un buen ejemplo para la salvación y conservación del entorno natural. Aproximadamente, al reciclar una tonelada de papel se están salvando de 18 a 20 árboles (depende el tamaño de la especie). A la vez, al reciclar grandes cantidades de papel y cartón, damos un poco más de tiempo para que el planeta pueda reforestarse por sí mismo; ya que una de las principales causas de la deforestación es la constante e indiscriminada tala de bosques en diversas partes del mundo.
Financieramente, el reciclaje también nos puede aportar innumerables beneficios, ya que nos supondrá un ahorro en el gasto de la compra de nuevos productos; por ejemplo, si necesitamos una libreta nueva, ¿por qué no realizamos una a partir del papel y el cartón que seguramente tenemos en casa?; o bien, si pensamos en desechar un mueble, ¿por qué no usamos su estructura (la madera, por ejemplo) para montar uno nuevo? Reciclar objetos implica que, como consumidores, evitaremos comprar más productos, puesto que podemos crearlos o transformarlos a partir de otros por nuestra cuenta. Además, en muchos países de Europa, en E.U.A. y en América Latina, el estado implementa iniciativas en que entrega una cantidad monetaria a cambio de la recolección y entrega de productos que puedan reciclarse, como envases de plástico (principalmente el conocido como PET), vidrio, latas de aluminio, papel, entre otros.
Finalmente, hay que tener en cuenta que reciclar no sólo beneficia al medio ambiente, sino también a nosotros y a las generaciones futuras, como habitantes de dicho medio.
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